Desde el neolítico, el hombre se rodeó de animales
domésticos que constituyeron para las sociedades primitivas una fuente preciosa
de trabajo y de materias primas, como el cuero, la lana, la leche y la carne.
La cría del ganado, sobre todo la del ganado mayor, fue durante mucho tiempo un
considerable signo externo de riqueza. En determinadas sociedades rurales
todavía y, hasta no hace mucho, también en las más próximas a nosotros, se
medía la riqueza por la cantidad de cabezas de ganado. El capital principal, en
el sentido económico del término, era la riqueza ganadera.
En un principio, los animales de gran tamaño, que hoy en día
son abastecedores de carne, se criaban por su fuerza mecánica (animales de
tiro, de silla o de carga, como el buey y el caballo) o para producir lana,
como la oveja. La carne er aun producto escaso y caro, reservado a los ricos.
La caza, la pesca, los animales pequeños de corral, aunque se veían a menudo en
los campos, también estaban destinados a las mesas de los privilegiados.
Para la gente humilde, es decir, la para la mayoría de la
población, la carne sólo aparecía en el plato en caso de fiesta mayor. Las
grandes fiestas suponían para los campesinos una buena gallina guisada. Esta dieta,
de reducido consumo de carne, sigue afectando a la población en los países en
vías de desarrollo.
La producción de carne en grandes cantidades, actividad
agrícola específica, es un fenómeno histórico reciente, posterior a la segunda
guerra mundial. Este fenómeno está estrechamente unido al desarrollo
industrial, al crecimiento de los ingresos y a la urbanización. Desde hade unos
50 años, la zootecnia ha permitido
generalizar métodos de producción intensiva, sobre todo en los animales de
tamaño pequeño, como las aves de corral, ya que en esos casos resulta más fácil
y cómodo planificar su crianza siguiendo las normas industriales.
La carne blanca de los animales de pequeño tamaño se ha
convertido en la base de una auténtica industria. Los gallineros industriales
(que en Europa se encuentran cada vez más difundidos, y que constituyen
práctica habitual en Estados Unidos), están en las afueras de las ciudades,
igual que lo estaban los corrales de las granjas.
La carne de bovino roja, muy apreciada por el consumidor, a
pesar de su precio más alto, es a veces carne de vaca lechera vieja
convenientemente tratada, aunque en muchos países predominan las explotaciones
ganaderas especializadas en la producción de carne de bovino (ternera, buey).
Otras carnes de gran consumo son las de cordero y cerdo.
¿Te sirvió el contenido del tema? ¿tienes alguna duda o sugerencia?
Puedes escribir un comentario en la parte de abajo y nosotros con gusto te responderemos. Esperemos que tengas un lindo día. ¡Mucho éxito en tus estudios!
