- Cristóbal Colón
La vida de Cristóbal Colón no ha sido puesta en claro. El propio descubridor se dio todas las mañas para ocultar con un velo misterioso su origen, la fecha y lugar de su nacimiento, su educación y su vida antes de aparecer en España. Los historiadores se han enredado desentrañándolo. Y uno de sus primeros biógrafos, el Padre Bartolomé de las Casas, dejó escrito: "Esta algarabía no la entiendo yo".
Lo que más se acerca a la verdad es que parece haber nacido en Génova por el año de 1451. Descendiente de una humilde familia de industriales, siendo sus padres Domingo Colón y Susana Fontanarosa. En su juventud fue marino. Relata extraña aventuras. Decía haber sido estudiante en la Universidad de Pavía, cosa que no ha sido comprobada. Del mismo modo sustentaba tener amistad con el sabio Toscanelli, el mayor cosmógrafo de su tiempo, amistad que tampoco ha sido comprobada.
Sus biógrafos lo describen así: "Alto, ancho de espaldas, con los rasgos del rostro acentuados, grandes ojos de expresión grave y triste; arrugas verticales marcan la frente con expresión de energía y de voluntad; los cabellos cortados a la manera de los jóvenes de hoy, se arrollan con espesos bucles. Las manos son finas y, por su gesto, dan al conjunto de la figura de un gran aire de dignidad."
Lo que ha sido comprobado es que vivió mucho tiempo en Lisboa. Allí caso con Felipa Muñiz Perestrello, hija de Bartolomé Perestrello, navegante, cuyos capitanes habían descubierto la isla de Porto Santo. En contacto con marinos, como llamaban entonces el Atlántico. Además, era asiduo lector de "Libro de las Maravillas" y creía en todos los relatos fantásticos de este escritor.
Colón aspiraba llegar a las Indias por el camino del Oeste, en vez de hacerlo por el Este, que era el conocido. Para eso buscó protección y ayuda a los poderosos. Se dirigió al Rey Juan II de Portugal, ero no logró nada, por lo que se dirigió a España, donde logró auxilio de sacerdotes como Fray Juan Pérez y Fray Antonio de Marchena, así como el duque de Medina Sidonia y del duque de Medinaceli. Los reyes de España, Fernando de Aragón e Isabel de Castilla, llamados los Reyes Católicos, lo atendieron, pero debido tanto a la guerra que sostenían contra los moros, como a las excesivas aspiraciones de Col´n, no habían llegado a un acuerdo, a tal extremo que colón iba a abandonar a España cuando fue llamado de nuevo por los Reyes españoles, que para entonces habían conquistado a Granada, expulsando así a los dominadores moros de España.
El 17 de abril de 1492 los monarcas españoles firmaron con Colón las llamadas Capitulaciones de Santa Fe, por las cuales los Reyes de España hacían a Colón su Almirante en todas aquellas islas y tierra firme descubiertas o conquistadas: le daban la décima parte de los negocios comerciales y le concedían el título de Don.
Concedida la autorización, Colón consiguió el dinero de Luis de Santángel, de la corte del rey Fernando; asoció a la expedición a marinos expertos en el arte de navegación, como Martín Alonso Pinzón y pilotos como Juan de la Cosa, y organizó tres naves debidamente abastecidas. Éstas eran: la Santa María, llamada también la Marigalante y la Gallega, que va a ser la nave capitana; la Pinta, mandada por Martín Alonso Pinzón, y la Niña, por Vicente Yáñez Pinzón. El número exacto de personas que hizo el primer viaje es desconocido. Unos dicen que noventa, otros que ciento veinte y algunos aseguran que únicamente iban sesenta y ocho.
- Los viajes de Colón
Colón realizó cuatro viajes En el primero salió de Palos de Moguer, el 3 de agosto de 1492. Después de una dramática travesía, el marinero Juan Rodríguez Bermejo -Rodrigo de Triana-, en la madrugada del 12 de octubre dio el histórico grito de "¡Tierra!" La tierra descubierta era una isla que recibió el nombre de San Salvador, Colón siguió navegando y descubrió las islas a las cuales nominó La Española, Santa María, Fernandina, Isabela y Juana.
Después de esto regresó a España llevando indios, planas y animales. Allí se le recibió apoteóticamente.
Colón organizó un segundo viaje. En él iban más de mil quinientas personas: hidalgos, clérigos, menestrales, los cuales se iban a establecer en las nuevas tierras. En este viaje Colón reconoció las Antillas Menores y descubrió Puerto Rico y Jamaica. Pasó a La Española donde encontró que los indios habían destruido el fuerte que había dejado en su primer viaje Ante el fracaso de la expedición, tuvo que regresar a España, para defenderse de los cargos de los descontentos.
En marzo de 1498 realizó su tercer viaje. En éste navegó hacia la línea ecuatorial. Descubrió la isla de Trinidad y las costas de Venezuela (1 de agosto de 1498). A su regreso a La Española fue reducido a prisión y encadenado. Así se le llevó a España. La reina Isabel le mandó a quitar las cadenas.
En mayo de 1502 realizó su último viaje. Reconoció las costas de Centroamérica, desde Honduras hasta Panamá. Regresó a España y se enteró de la muerte de su protectora la Reina Isabel.
Murió dos años después de ella, el 20 de mayo de 1506. Sobre su tumba se escribió el siguiente epitafio: "A Castilla y a León, Nuevo Mundo dio Colón".
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