La patata (Solanum
tuberosum), de las familia de las solanáceas, es una planta anual que
cultiva por los tubérculos, extremidades de sus tallos subterráneo. Originada
de las regiones meridionales elevadas y frías de Chile, Colombia, Bolivia y
Perú, donde antiguamente era cultivada por los indios, la patata o papa se
extendió tras la conquista a México y otras regiones americanas. Se introdujo
en España hacia el año 1534, y hacia 1570 era ya conocida en Europa gracias a
Charles Lecluse, o Clusius, que lo difundió por Alemania, Austria, Italia y
Francia, con el nombre, de origen italiano, de tartufoli (o trufa).
La patata no tuvo un gran éxito cuando fue introducida en
Europa. Durante mucho tiempo estuvo reservada a la alimentación animal,
particularmente de los cerdos. Se negó que tuviera cualidades nutritivas y se
le achacó que era flatulenta, e incluso se habló de que propagaba la lepra. Las
crisis agrícolas y el hambre de fines del siglo XVIII en Europa favorecieron su
consumo, y en el siglo XIX la patata pasó a ser, con los cereales, un elemento
básico de la alimentación de las clases populares.
Valor nutritivo
La patata es la planta alimenticia más cultivada: se siembra
prácticamente en todas las latitudes. Con una producción mundial anual de 300
millones de toneladas, es uno de los elementos principales de la alimentación
humana. Su valor nutritivo se debe a su riqueza en almidón, que tiene la doble
cualidad de ser energético y muy digestivo, lo que la aproxima al pan y explica
la posibilidad de sustituirlo. Sin embargo, la patata aporta 80 calorías por
cada 100 g, mientras que el pan aporta 240. Es pobre en calcio pero rica en
potasio, en vitamina PP y en vitamina C. En principio, no contiene solanina en
su pulpa, alcaloide tóxico que sí se encuentra en su piel. Sin embargo, pueden
desarrollarse alcaloides nocivos durante la germinación, por lo que no se
recomienda el consumo de patatas germinadas.
Composición nutritiva de la patata
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Por 100 g
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Agua
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76 g
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Glúcidos
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20 g
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Lípidos
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O,1 g
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Proteínas
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2 g
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Calcio
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15 mg
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Magnesio
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30 mg
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Potasio
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500 mg
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Vitamina PP
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1, 5 mg
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Vitamina C
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40 a 50 mg (disminuye al almacenarse)
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Valor calórico
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80 kcal
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Variedades
Se distinguen numerosas variedades, que se clasifican como
industriales (para la fabricación de fécula), forrajeras (para la alimentación
del ganado) y de huerta (para consumo). También se las puede clasificar por su
precocidad, por su forma, por el color de su piel o de su carne. En función de
la aparición en el mercado se distinguen:
Patata temprana o patata nueva, que se vende en primavera
y verano; hay que cogerla antes de que madure, y consumirla lo más fresca
posible. Su piel es muy fina y se quita simplemente con cepillarla (variedades
Marjolín, Rosa temprana, Royale, Victoria extra).
Patata tardía, que
se encuentra en el mercado durante todo el año. En esta clase se encuentran las
variedades Magnum-bonum, Canadá, Roja de Holanda, Copo de nieve, Elefante
blanco, etc.
Existen para terminar, variedades destinadas a la obtención
de fécula, que son muy ricas en almidón, y otras destinadas a otros preparados
industriales, como los productos fritos y los deshidratados.
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