Casi todo el continente estaba dominado por extranjeros hasta
antes de la Segunda Guerra Mundial, excepto Etiopía, Liberia y Egipto. Sus
riquezas naturales como las grandes reservas de uranio y radio (minerales
atómicos importantes), la producción de oro, diamantes y petróleo, así como la
fuerza de trabajo barata que en forma milenaria ha otorgado África,
significaron para los occidentales europeos un potencial económico, de tal
manera que decidieron repartirse el continente desde mediados del siglo XIX.
Después del segundo conflicto mundial se dieron en África
movimientos de liberación en forma intensiva. La dominación colonial de
aproximadamente un siglo pronto estalló. Se presentaron movimientos muy
dispersos y diferentes por la heterogeneidad de los países africanos; existen
entre ellos problemas raciales de blancos y negros; conflictos religiosos entre
musulmanes, católicos y creencias locales, pugnas por cuestión de límites.
El continente ha despertado después de la Segunda Guerra
Mundial para tratar de dejar de ser únicamente proveedor de materias primas y
mano de obra barata, y así liberarse de la tutela y dominio extranjero.
Colonos franceses arribaron a este país del norte de África
de población musulmana a mediados del siglo XIX. Se fueron imponiendo por la
fuerza hasta convertirse en la colona más preciada de Francia. Dispusieron de
las tierras argelinas para integrar una región francesa en territorio africano.
Inculcaron su idioma. Establecieron escuelas superiores como la Universidad de
Argel, con gran prestigio entre las universidades del mundo. Mejoraron sistemas
de riego y cultivo aumentando la producción agrícola. Se incrementó la
industrialización. El esforzado trabajo de los oriundos y la tecnología europea
se conjuntaron para varias obras como carreteras, puentes y ferrocarriles. Un
siglo de hondas transformaciones sociales y de crecimiento económico en la
Argelia francesa, con los beneficios y riquezas acaparados por los franceses.
Después de la Segunda Guerra Mundial la palabra
independencia se pronunciaba en todo el mundo y Argelia no era la excepción. El
1 de noviembre de 1954 se iniciaron las hostilidades entre los nacionalistas
argelinos y los franceses, quienes en este año habían sufrido una humillante
derrota militar en Dien Bien Phu que les permitió a los vietnamitas liberarse.
Un movimiento que se prolongaría ocho años, caracterizándose
por sanguinario y sucio ya que frecuentemente los edificios oficiales sufrían
atentados, explosiones en los servicios públicos, asesinatos de personas y
actos terroristas inculcaban temor a la población francesa para que se retirase
de Argelia.
Ahmed Ben Bella |
Apareció el Frente de Liberación Nacional (FLN) encabezado
por argelinos que habían luchado en las filas francesas durante la Segunda
Guerra Mundial. Ahmed Ben Bella, condecorado por el gobierno francés por haber
sobresalido en el conflicto mundial, impulsó la lucha armada para lograr la
independencia sin perder de vista los principios islámicos; extendiéndose
rápidamente el movimiento.
El gobierno francés reaccionó reforzando las filas
militares; las detenciones y aplicaciones de torturas se volvieron cotidianas.
En 1956 el avión en que viajaba Ben Bella y otros dirigentes del FLN fueron
secuestrados por la fuerza aérea francesa, siendo apresados hasta que terminó
el conflicto. Más se encendieron los ánimos revolucionarios.
El movimiento rebasó las fronteras argelinas, los moderados
refugiados en el Cairo se unieron al FLN e integraron el Gobierno Provisional
Republicano de Argelia. Posteriormente la aviación francesa bombardeó Túnez por
el apoyo que brindó este país a la insurrección argelina. La ONU reclama a los
contendientes solucionar el problema.
En 1958, el general Charles de Gaulle fue investido de altos
poderes por la Asamblea Nacional Francesa, se inclinó por la paz en Argelia y
vio con realismo la situación. Al mismo tiempo se dio la integración de los
sectores extremistas franceses, oponentes al FLN, en la Organización de L’armee Secrete (OAS). Por medio del terrorismo y
la violencia trataron de acabar con el movimiento de liberación; el mismo de
Gaulle escapó de un atentado por este organismo.
La situación reforzó la voluntad del dirigente francés,
además, la crisis moral y política hacía mella en la misma Francia. Las
negociaciones para un arreglo iniciaron en 1960; fueron difíciles por el deseo
francés de quedarse con el Sahara argelino, rico en petróleo y gas natural.
Posteriormente, sin esta pretensión, en la ciudad de Evian se firmó el cese al
fuego en marzo de 1962 y el 3 de julio se proclamó la independencia de Argelia;
llegaban a su fin más de cien años de coloniaje y ocho de muerte y destrucción.
Ben Bella fue liberado de la prisión francesa y nombrado presidente del nuevo
Estado independiente.
El pueblo festejó porque la lucha no fue en vano, ondearon
las banderas verdiblancas de medias lunas y estrellas. Su situación
socioeconómica y política es difícil; había que desarrollar sus propias formas
culturales tomando de lo occidental lo que pudiera favorecerlos.
¿Te sirvió el contenido del tema? ¿tienes alguna duda o sugerencia?
Puedes escribir un comentario en la parte de abajo y nosotros con gusto te responderemos. Esperemos que tengas un lindo día. ¡Mucho éxito en tus estudios!